Uso irracional de antibióticos, un problema para la salud

El abuso y la inadecuada administración de los antibióticos son causa habitual de las resistencias bacterianas. Tomarlos innecesariamente debilita su capacidad para combatir infecciones cuando sí son necesarios, y en consecuencia, permite a las bacterias desarrollar resistencia a los antibióticos.

Uno de los grandes problemas en el ámbito de la salud a nivel mundial es la automedicación con antibióticos y su uso irracional. La Dra. María Laura Yantorno, del Servicio de Infectología del Sanatorio Argentino, señala que “al realizar una prescripción de medicamentos, incluidos los antibióticos, se debe poner especial importancia en la necesidad clínica de la persona, en la dosis correspondiente, en la duración, en los posibles efectos adversos y en los costos. Si estos requisitos no se cumplen se debe considerar que se hace un uso irracional o inadecuado de los antibióticos”.

Dependiendo de cada país, se estima que entre 30 a 60 por ciento de las personas que consultan en el Primer Nivel de Atención recibe una prescripción de antibióticos de casi el doble de lo que realmente necesita.

El mal uso de los antibióticos incluye no sólo la sobre-prescripción sino también la utilización de drogas inadecuadas para el germen a tratar, dosis, vías de administración y tiempos de tratamientos incorrectos.

La Dra. Yantorno agrega que “los ejemplos más comunes de uso inadecuado de antibióticos son el tratamiento de cuadros de vías aéreas superiores (resfrío común, gripe, anginas), cuadros diarreicos, urocultivos positivos en personas que no tienen síntomas de infección urinaria, entre otros”.

En esta línea, la Organización Mundial de la Salud aclara desde su sitio web que los antibióticos son efectivos contra las bacterias y no contra los virus, al tiempo que explica que los virus son los responsables del 90 por ciento de las irritaciones de garganta y del 100 por ciento de los casos de gripe.

Para finalizar, la Dra. Yantorno puso especial énfasis en que “las personas no se automediquen y que, ante la presencia de síntomas de enfermedad consulten a su médico, quién sabrá en base al diagnóstico cómo realizar el tratamiento correspondiente y la administración de medicamentos en caso de ser necesario”.

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