Con la llegada de los meses más fríos, y como cada año, en la Argentina se lanza la Campaña de Vacunación Antigripal con el fin de prevenir y controlar la diseminación en la comunidad del virus influenza, causante de la gripe.

La doctora María Marta Greco, del Servicio de Infectología del Sanatorio Argentino de La Plata,  señala que “se trata de una enfermedad respiratoria que se contagia y suele ser leve, aunque existen formas graves que pueden poner en riesgo la vida; sobre todo en personas de los grupos de riesgo como niños pequeños, embarazadas, ancianos y enfermos crónicos”.

Las epidemias de gripe se reiteran anualmente, y según la Organización Mundial de la Salud esta infección causa en el mundo de 3 a 5 millones de casos de enfermedad grave, y de 250.000 a 500.000 muertes cada año.

La vacuna fue incorporada al Calendario Nacional de Vacunación de Argentina mediante la Resolución Ministerial 35/2011 con el objeto de disminuir las internaciones, complicaciones, secuelas y mortalidad en la población de riesgo.

La doctora Greco cuenta qué personas integran los grupos de riesgo que deben vacunarse contra la gripe: “personal de salud, embarazadas en cualquier trimestre de gestación y puérperas que no hubieran recibido la vacuna durante el embarazo, en no más de 10 días de haber egresado de la maternidad. También niños de 6 a 24 meses, y pacientes mayores o igual de 65 años”.

“Otro de los grupos de riesgo son las personas de entre 24 meses y hasta 64 años inclusive, con enfermedades respiratorias, enfermedades cardíacas, inmunodeficiencias congénitas o adquiridas, pacientes con enfermedades oncológicas y trasplantados, obesos con índice de masa corporal mayor a 40, diabéticos, pacientes con insuficiencia renal crónica en diálisis o por comenzar, retraso madurativo grave en menores de 18 años, convivientes de bebés prematuros de bajo peso (menos de 1500mg) y convivientes de pacientes con enfermedad oncohematológica”, agregó.

Ante la consulta de cuáles son las recomendaciones para evitar el contagio de la gripe, la doctora Greco aseguró que “la principal manera de prevenir esta enfermedad es vacunándose al inicio del otoño con la vacuna recomendada para ese año”.

Y enumeró otras medidas que pueden ayudar a evitar la propagación:

• Cubrir nariz y boca con un pañuelo descartable al toser o estornudar y descartar el pañuelo inmediatamente.
• A continuación lavarse las manos con agua y jabón o frotarlas con un desinfectante a base de alcohol.
• Si no dispone de pañuelo, cubra nariz y boca con el ángulo del codo para toser o estornudar.
• Evite llevarse las manos a la nariz, ojos o boca.
• Practicar con frecuencia el lavado de manos o la desinfección durante el día
• Mantener distancia de las personas enfermas.
• Desinfectar objetos o superficies que pudieron entrar en contacto con las secreciones de personas enfermas.
• Y, por supuesto, una dieta saludable, el ejercicio y el no fumar, ayudan a protegernos contra ésta y otras enfermedades.

Ante cualquier duda o necesidad de mayor información, consulte con su médico.